Diez recomendaciones críticas

Diez recomendaciones críticas

Por: Víctor Maldonado C.

E-mail: victormaldonadoc@gmail.com

Sensatez. Sólo el reconocimiento de la verdad nos permite hablar con sensatez de errores y de crítica racional, y hace posible la discusión racional, vale decir, la discusión crítica en busca de errores con el serio propósito de eliminar la mayor cantidad de éstos que podamos, para acercarnos más a la verdad. Así, la idea misma de error –y de falibilidad- supone la idea de una verdad objetiva como patrón al que podemos no lograr ajustarnos. (Karl Popper)

Coraje. Permanece atento y permite la respuesta. No temas, sea cual fuere el resultado. Acepta lo desconocido como parte de la experiencia de la vida. Centrado, arraigado, inalterable. Pase lo que pase. (Buda). Obrar con coraje no implica una hazaña gloriosa o un gesto heroico. Se trata más bien de la fortaleza para realizar esfuerzos perseverantes por alguna causa correcta, aunque otras personas no se den cuenta de ello o no lo valoren. (Nichiren)

Perseverancia. Involúcrate vigorosamente en la conducta constructiva y mantén el esfuerzo en ello. Recuerda que esto implica mucho más que mantenerse en una tarea positiva; incluye la valentía heroica de no darse por vencido y disfrutar el hecho de hacer algo constructivo. (Berzin)

Optimismo. Recuerda que, para llevar a cabo una acción positiva, debemos desarrollar una visión positiva. Elige ser optimista, se siente mejor. Mira el mundo desde una perspectiva más amplia. Cada día hay algún problema. Pero si alguien piensa que el mundo es así, se equivoca. Entre 6000 millones de personas, los que hacen cosas malas son sólo un puñado. (Dalai Lama)

Amor. Ama lo que haces. El amor es paciente, es servicial; el amor no es envidioso, no hace alarde, no se envanece, no procede con bajeza, no busca su propio interés, no se irrita, no tiene en cuenta el mal recibido, no se alegra de la injusticia, sino que se regocija con la verdad. El amor todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. (San Pablo)

Prudencia. Aprende a conocer la calidad de los inconvenientes y tomar por bueno el menos malo. Eso requiera que busques consejo y deliberes sobre los medios conducentes al bien común; desarrolles el buen juicio por el que determinamos cuál es el medio más útil para alcanzarlo y, actúas sobre la realidad instrumentando las acciones ya deliberadas y juzgadas como convenientes. (Maquiavelo)

Templanza. Construye tu libertad sobre los cimientos de la templanza. Controla tus pasiones, tanto los placeres como los deseos, y las tristezas que te provocan el no poder realizarlas. (Tomás de Aquino)

Paciencia. Muestra buen ánimo al tolerar los males. No permitas que el mal humor te quite la oportunidad de conseguir las cosas mejores. Recuerda que los impacientes, cuando no quieren padecer cosas malas, no consiguen escapar de ellas, sino sufrir males mayores. Pero los que tienen paciencia prefieren soportar los males antes que cometerlos y no cometerlos antes que soportarlos, aligeran el mal que toleran con paciencia y se libran de otros peores en los que caerían por la impaciencia. (Agustín de Hipona)

Alegría. Ser feliz no es difícil. La alegría de aprender es la búsqueda constante de la verdad desde un estado de perplejidad hasta la comprensión. Esto viene a través del propio esfuerzo, trayendo consigo una satisfacción ilimitada. Haz amigos. Escucha música. Educa el pensamiento de los demás. Ama la naturaleza. Regodéate en los paisajes. Disfruta de una comida bien preparada. (Confucio)

Fe. Un mundo sin Dios termina construyéndose antes o después contra el hombre. Ciencia y Fe son dones de Dios. En Cristo, verdadero hombre y verdadero Dios, podemos descubrir la verdad plena sobre nosotros mismos y sobre nuestro destino. (Juan Pablo II) Lámpara es a mis pies tu palabra, Y lumbrera a mi camino. Maravillosos son tus testimonios; Por tanto, los ha guardado mi alma. La exposición de tus palabras alumbra; Hace entender a los simples. (Salmo 119)